Asesinos inocentes. Lectura mano a mano con José Javier Abasolo

Asesinos inocentes. «Lo más interesante» con José Javier Abasolo

En Asesinos inocentes de José Javier Abasolo, todo gira alrededor de su protagonista, Markel Zugasti. Lector incluido.

Markel es un abogado sin demasiados escrúpulos —quizás sin ningún escrúpulo— cuyo único objetivo en la vida es saciar sus instintos, que se reducen a dos: el sexo y el dinero, y no necesariamente en este orden. Trabaja en el despacho que fundó su padre, este sí, abogado de firmes principios y prácticamente retirado.

[…] me hice cargo de la mayor parte del negocio y le di una vuelta tal, que si mi abuelo saliera de la tumba volvería a meterse en ella, horrorizado.

Asesinos inocentes: una situación perfecta que termina complicándose

La historia comienza cuando Markel evita que el padre de una amiga de juventud, Karmele Mentxaka, sea desahuciado de su vivienda. Al poco tiempo, es detenido por asesinato y Karmele le pide que sea su abogado y que le saque de la cárcel. Empujado  por fines poco altruistas, Markel se ve envuelto en una investigación que, a pesar de parecer sencilla, pone en riesgo tanto su seguridad como la de quienes le rodean, y que rápidamente le supera.

La verdad es que como he sido del gremio conozco a un buen número de abogados, pero afortunadamente ninguno es como Markel, aunque haberlos haylos, de eso estoy seguro. En el fondo es un canalla que intenta ser simpático. Con todas las reservas posibles podría decirse que entronca con el típico personaje de la literatura picaresca, sólo que éste solía ser un desarraigado que lo que intentaba era sobrevivir, mientras que Markel pertenece a una clase mucho más acomodada y lo que busca es vivir lo mejor posible sin pararse en barras, lo que puede disminuir su «simpatía», evidentemente.

Sobre Asesinos inocentes. José Javier Abasolo

«La situación era perfecta y todo se había desarrollado como yo había imaginado con anterioridad». Así comienza Asesinos inocentes: una situación perfecta que termina siendo una compleja trama lejos del control del abogado.

Asesinos inocentes está narrada en primera persona. El lector se va involucrando en la trama a través de los ojos del protagonista. El carácter egocéntrico, inmaduro e inconsciente de Markel empapa el desarrollo de la investigación ya que es él el que cuenta la historia. Markel se interpone entre la historia y nosotros porque es él quien elige qué y cómo contarlo. Conocemos a los personajes a través de las percepciones del protagonista, así que algunos de ellos quedan un poco desdibujados ya que Markel, en realidad, solo habla de sí mismo. Algunas de las situaciones que en principio deberían de ser dramáticas, envueltas en el sarcasmo del narrador, dejan de serlo. Cuando terminamos de leer la novela los asesinos llegan a parecernos más inocentes que el protagonista. Abasolo consigue que el lector no se fíe plenamente de las impresiones del protagonista. A lo largo del libro nos cuestionamos si realmente el narrador cuenta toda la verdad o su ego distorsiona el desarrollo de la investigación.

Narrando en primera persona busco sobre todo caracterizar mejor al personaje. Markel es un abogado sinvergüenza e inmoral, pero que no sabe nada de criminología aunque se ve forzado a ejercer de detective. Con la primera persona me es más sencillo asomarme a sus errores, contradicciones y pensamientos, e incluso explicar su personalidad, porque si tiene algo de positivo es que ni se engaña a sí mismo ni a los lectores. Sabe lo que es y cómo es y está «encantado de haberse conocido».

Sobre Asesinos inocentes. José Javier Abasolo

A pesar de ello la protagonista femenina va ganando intensidad a lo largo de la novela. Karmele es una mujer que, al contrario que Markel, no ha contado con el apoyo de una familia acomodada y ha tenido que ganarse todo a pulso. Es ella la que empuja al abogado a investigar el asesinato del que es acusado su padre, ella es la que pone algo de cordura en el desarrollo de la historia y la que logra hacer tambalear los poco firmes principios de Markel. Consiguiendo que Markel confíe en ella, Karmele consigue que él arriesgue todo lo que tiene para que su padre sea considerado inocente.

José Javier Abasolo: Me he «resignado» a ser el padre de Goiko

En la saga de Mikel Goikoetxea, el ritmo es mucho más descarnado. A pesar de que el exertzaina es un personaje agrio que destila sarcasmo por todos sus poros, el cinismo del detective es más negro, más profundo. El lector logra empatizar con él a pesar de que representa uno de los lados oscuros de la sociedad. Markel es más básico y por eso, más frívolo.

Al final lo que prima es la historia. El sentido de la justicia, peculiar pero inequívoco, de Goiko no hubiera funcionado en Asesinos inocentes, que requería un personaje más amoral y sinvergüenza, como Markel. Pero éste, lo tengo claro, no habría dado juego en las novelas de la serie de Goiko. Al final es encontrar el personaje adecuado para cada historia y, una vez encontrado, me siento igual de cómodo.

Sobre Asesinos inocentes. José Javier Abasolo

José Javier Abasolo nos empuja al mundo cínico de Markel Zugasti en Asesinos inocentes, un mundo donde los únicos inocentes son los asesinos. Espero que este sea el comienzo de una bonita amistad…

De momento Markel se creó exclusivamente para esta novela, no creo que vaya a tener más recorrido, salvo que surja en mi cabeza una historia en la que el protagonista deba tener su perfil. Además, aunque en otros países no es raro que un escritor tenga dos o más series con distintos personajes, no estoy seguro de que eso funcionara aquí, y ya tengo a Goiko. Es curioso, porque hasta el momento de las quince novelas que llevo publicadas sólo en cuatro ha sido el personaje principal, pero los lectores siempre me hablan de él —y me piden más historias, lo que es halagador aunque supone un «plus»de responsabilidad—, así que me he «resignado» a ser el padre de Goiko. Una resignación que llevo con mucha alegría y muchas ganas, por lo que puedo afirmar sin la menor duda que, aunque no vaya a ser inminente, habrá una quinta entrega. Y aunque de momento no voy a desvelar nada, sí puedo decir que estará relacionada con el mundo del cine.

Sobre Asesinos inocentes. José Javier Abasolo

 

Reseña y entrevista: Almudena Natalías     

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