Félix García Hernán: Cava dos fosas y la olvidada transición democrática

Félix García Hernán estudió Derecho en la Universidad Nacional de Educación a Distancia, pero es, por vocación, un hotelero que desde sus inicios como botones, todavía adolescente, ha recorrido todos los peldaños de su profesión hasta llegar a dirigir en Madrid, su ciudad, establecimientos tan emblemáticos como el hotel Urban, el Villa Real o el Only You, y pertenecer al Consejo de Administración de la prestigiosa asociación Small Luxury Hotels of the World.

Es, desde la infancia, un lector compulsivo y amante de la música clásica y del cine.

Además de Cava dos fosas (Alrevés, 2020), Pastores del mal verá la luz próximamente en esta misma editorial.

Félix García Hernán: «Van a vivir Cava dos fosas como si estuvieran dentro de ella

Carolina Beltrán: —¿Siempre te ha gustado escribir?, ¿cuándo sentiste ese interés por publicar aquello que escribías o que tenías en mente?

Félix García Hernán: —No, siempre me ha gustado leer. Lo de escribir no me llamaba la atención. De hecho, me costaba hasta redactar los informes que requería mi trabajo. Pero, hace unos años me encontré por primera vez con el suficiente tiempo para trasladar al ordenador una historia que llevaba tiempo rondando en mi cabeza. Cuando terminé, y aprovechando que estábamos de vacaciones, se lo pasé a leer a quien sabía que no podía negarse: Silvia, mi pareja. Unos días después, ella dijo las palabras mágicas que me cambiaron la vida:

No sé lo que pensarán los demás, pero a mí me has castigado sin mi sagrada siesta de vacaciones: no podía dejar de leer.

Ahora, cuatro años después, he tenido la fortuna de que Gregori Dolz, editor de Alrevés, confiara en mí para publicar Cava dos fosas.

CB: —Antes de iniciar una novela, ¿eres de los autores se dejan llevar por la improvisación o lo tienes todo planificado desde el principio?

Félix García Hernán: —No utilizo escaleta. Tengo claro el principio y una idea aproximada de la historia. Y esta, si la dejas, va surgiendo sola. Sobre todo, si antes de empezar a escribirla ya tienes en la mente el escenario. Trato también de pensar en el lector, lo mismo que he hecho con mis clientes durante mi trayectoria como hotelero: si logro adelantarme a sus deseos, ya habré recorrido la mitad del camino.

CB: —¿Cómo surgió la idea de Cava dos fosas? ¿Cuál es el origen de todo?

Félix García Hernán: —Cava dos fosas es sin duda el libro que más he disfrutado escribiendo, quizá porque tenía una asignatura pendiente con mi protagonista, el comisario Javier Gallardo: explicarme a mí mismo de dónde había salido. También quería hablar de una época de nuestra historia que parece que se ha vuelto invisible: la transición democrática. No sería bueno olvidar de dónde venimos, para intentar no caer en los errores que se cometieron entonces.

CB: —Cava dos fosas creo que es un título ideal para esta novela que se va entendiendo mejor a medida que vas avanzando en su lectura, ¿te costó mucho escogerlo?

Félix García Hernán: —La verdad es que sí, pero tengo que atribuir ese mérito a la escritora Mercedes Castro, con la que he trabajado en la edición de esta novela. De hecho, el primer título que tenía lo desestimamos por ser demasiado explícito.

CB: —Uno de los puntos fuertes de este libro es la excelente ambientación que hay de la España de los años 80. ¿Cuánto trabajo de documentación hay detrás de esta novela? ¿Te resultó fácil ese proceso?

Félix García Hernán: —En esa época yo estaba rozando la treintena, y observaba todo lo que pasaba a mi lado sin llegar a creérmelo del todo. La tengo muy fresca en la memoria, pero, por supuesto, tuve que realizar un buen trabajo de campo para coordinar fechas, lugares y sucesos. Disfruté mucho haciéndolo. Aprovecho esta pregunta para rendir homenaje a los escritores de épocas pasadas. ¡Cuánto hubieran dado todos ellos por haber dispuesto de un ordenador, que en milésimas de segundos les proporcionase la información que buscaban!

CB: —Hablando de los personajes de Cava dos fosas, Javier Gallardo es un policía diferente, intenta ayudar a los demás, no se deja pisotear ni influenciar por aquellos que tienen el poder. ¿Crees que había muchos policías como él?

Félix García Hernán: —Rotundamente sí. En una cesta de manzanas, siempre llaman la atención las que están podridas, aunque sean mucho menores en número que las sanas. En la transición hubo mucho nostálgico del franquismo, pero también elementos jóvenes que sabían que la única salida de los cuerpos de seguridad del Estado era la de adecuarse a la legalidad y convertirse en lo que estoy convencido que son ahora en su inmensa mayoría: servidores del pueblo y garantes de su seguridad.

CB: —En esta novela también hay una presencia femenina muy potente que es Carmen Núñez-Quiroga, una mujer luchadora y adelantada a su época. ¿Te ha costado mucho crear a este personaje?

Félix García Hernán: —Me encanta esta pregunta; Carmen es mi personaje favorito. Cuando la diseñé lo hice pensando en todas las mujeres de aquella época que, sin apenas apoyo social ni institucional, lucharon infatigablemente para lograr que ahora, treinta años después, la igualdad real y no solo legal de la mujer esté bastante más cerca que entonces.

CB: —Tengo que reconocer que aun siendo gran apasionada de la novela de género negro ésta es una novela dura, que consigue transmitirte una sensación de angustia durante su lectura. Para aquellos lectores que todavía no se han adentrado en la lectura de Cava dos fosas, ¿qué les dirías que van a encontrar en ella?

Félix García Hernán: —Que la van a vivir como si estuvieran dentro de ella. Incluso tendrán deseo de interactuar con los personajes. Una de mis mayores preocupaciones al escribirla era esa, que el lector se sintiera dentro del escenario, que llegara a oler lo que estaba pasando. La novela es dura, pero no olvidemos que es una novela negra. Sé que el lector podrá llegar a sentir odio, miedo, frustración o rabia, pero también valores como el amor, el compañerismo o el sacrificio

CB: —Si tuvieras que elegir un personaje de ficción con quien poder sentarte a hablar un rato, ¿a quién elegirías?

Félix García Hernán: —Sin duda, a Pepe Carvalho. Con la ilusión de que esa noche cocine para mí.

CB: —Por último, ¿qué está leyendo en este momento, Félix? ¿Qué libros nos recomendarías para estos días?

Félix García Hernán: —Estoy leyendo En la casa Vacía, de Manuel Barea. Y recomiendo encarecidamente Los Caín, de Enrique Llamas, cuya lectura me impactó.

Entrevista: Libros por doquier

Portada de David de la Torre

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