La temporada de premios comenzó con una singular mirada a un año fílmico y televisivo de sorprendente calidad. Una prueba evidente es la lista de las nominadas para mejor serie dramática de la venidera entrega de los premios Globo de Oro 2019. Todas tienen algo en común: son una aproximación por completo novedosa a sus aparentes géneros de origen. Desde la mirada cruda, silenciosa y contenida de The Americans sobre la identidad bajo la apariencia de un drama de espionaje hasta la concepción del prejuicio teñido de espectacularidad en Pose, la selección es una mirada reflexiva a la evolución de la televisión en el auge de su llamada época dorada y también, una convencida respuesta a la constante evolución de los hábitos televidentes. Una reformulación de viejos tópicos y estereotipos.
De espías a la sofisticada Nueva York de los ochenta: Las cinco nominadas al #GloboDeOro a la Mejor Serie Dramática. Por @Aglaia_Berlutti. @goldenglobes. @TheAmericansFX @HomecomingTV @KillingEve @PoseOnFX. Share on XDesde series que se despiden de la pantalla chica con magníficas temporadas conclusivas hasta estrenos de inesperado éxito, la lista de candidatas al premio otorgado por la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood es la siguiente:
Las cinco nominadas al Globo de Oro 2019 a la Mejor Serie Dramática
The Americans (Joe Weisberg para FX Network)
Nominaciones al Globo de Oro a la mejor serie dramática —1—
Con su última temporada aún fresca en la memoria de la audiencia, The Americans recibe un reconocimiento tardío a su altísima factura y sobre todo, a una historia original que trascendió los límites naturales del género de espionaje, para convertirse en algo más. Con toques de crítica social, cultural y su afortunada combinación entre el suspenso y el drama, la serie logró encontrar una forma de relatar una historia imposible con un realismo doloroso cautivador. Keri Russell logró dotar a su Elizabeth de una durísima ambigüedad que además, se convirtió en símbolo del punto de vista de la serie sobre el precario equilibrio de su personaje entre dos mundos radicalmente distintos. Como espía rusa en suelo norteamericano, Elizabeth no sólo confronta la idea sobre la identidad, la lealtad, el dolor y el miedo de formas por completo nuevas, sino que permitió a la serie meditar sobre la vieja dualidad entre la concepción de la realidad y la realidad en sí misma. Todo un triunfo argumental que con toda probabilidad convertirá a The Americans en una inmediata serie de culto.
The Bodyguard (Jed Mercurio para BBC)
Nominaciones al Globo de Oro 2019 a la mejor serie dramática —2—
Heredera inmediata de Homeland y otras ficciones en las que la cordura de su protagonista está relacionada directamente con la percepción de la realidad del argumento, el sorpresivo éxito de la BBC llega a la lista de nominadas convertida en quizás una de las series emblema de un año con tendencia hacia las visiones intimistas del miedo, el horror y la acción. El actor Richard Madden elabora una versión sobre el habitual héroe escindido por sus lealtades y sufrimiento psicológico, en algo mucho más complejo que además, bordea cierta contención violenta que le convierte en una interesante síntesis de valores y terrores colectivos. The Bodyguard además, evita discursos maniqueos, a pesar de tocar todo tipo tópicos políticos y morales. Pero al argumento no le interesa pontificar en ninguno de ellos, sino comprender los límites de la moral en medio de situaciones críticas. Con su engañosa apariencia de producto genérico de acción, The Bodyguard es una mirada moderna sobre la percepción sobre la violencia, sus consecuencias e implicaciones.
Homecoming (Sam Esmail, Micah Bloomberg y Eli Horowitz para Amazon Prime)
Nominaciones al Globo de Oro 2019 a la mejor serie dramática —3—
El gran debut en la pantalla chica de Julia Roberts en Amazon Prime — eso, sin contar su célebre cameo en Friends en 1996 — es un drama poderoso y enigmático, que guarda algunos paralelismos con éxitos recientes como Maniac y The Haunting Of Hill House (ambos de Netflix), aunque su perspectiva sobre lo moral, el bien y el mal parece estar más relacionada con The Good Place, aunque sin el giro burlón y cínico de la serie de la NBC. Con todo Homecoming tiene una destreza impecable para deslizarse entre el misterio y las revelaciones sorpresivas, sin perder verosimilitud y mucho menos, la contundencia de una percepción de la realidad que parece cambiar por minutos. Julia Roberts afronta la ambigüedad del argumento con inteligente y solidez, lo que convierte a su personaje en centro motor de una serie de acciones aparentemente sin relación alguna pero que aún así, crean un desconcertante rompecabezas de cuestionamientos y preguntas sin responder. Homecoming se basa sobre todo lo que se oculta debajo de lo que parece una interpretación simple de la realidad, pero más allá de eso, en la sensación inevitable que la acción se dirige hacia el centro mismo de un misterio casi inaudito. Todo un logro narrativo que los creadores Sam Esmail, Micah Bloomberg y Eli Horowitz superan con creces.
Killing Eve (Phoebe Waller-Bridge para BBC America)
Nominaciones al Globo de Oro 2019 a la mejor serie dramática —4—
Adaptación de la saga de novelas del escritor Luke Jennings, Killing Eve también podría catalogarse dentro del género de espías, aunque por supuesto, no lo es del todo ni tampoco, parece desear serlo. Inteligente, mordaz y sostenida sobre rápidos y ágiles diálogos, la serie avanza a mitad de camino entre algo parecido a la comedia y una percepción única de la tragedia. Entre ambas cosas, Killing Eve tiene la capacidad además, de elucubrar de manera mordaz sobre las motivaciones de cada uno de sus personajes. Cuando el escenario se completa con la noción evidente de la acción convertida en excusa para ciertas disquisiciones morales y existenciales, la serie toma verdadera potencia y alcanza un fantástico ritmo que la convierte sin duda en uno de los sucesos de la temporada.
Pose (Ryan Murphy, Brad Falchuk y Steven Canals para FX)
Nominaciones al Globo de Oro 2019 a la mejor serie dramática —5—
Ryan Murphy está decidido a crear un nuevo tipo de televisión: desde su original giro a las series antológicas hasta el poderoso estilo visual que imprime en cada una de ellas, el productor demostró que el formato serial tiene la capacidad de racionalizar ideas en apariencia sencilla en algo más elaborado y profundo. Con Pose no sólo eleva la apuesta a un nuevo nivel, sino que además añade todo tipo de elementos sociales y culturales que la convierten en el experimento más ambicioso de Murphy: Ambientada en la Nueva York de finales de los ochenta y en pleno corazón de la comunidad Queer, Pose retrata la evolución de un grupo de personajes que luchan contra la mirada binaria al género, la percepción tradicional de la sexualidad y la discriminación. El productor además imprime una profunda fuerza estética al argumento, lo que convierte a cada capítulo en una rareza visual de enorme valor.
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